Al magnolio se le están cayendo las semillas, son rojas, muy rojas. Y un gato negro se ha venido a vivir a casa. Viene a ratos. Entra y sale.
He vuelto a hacer listas, y calendarios, números y letras, círculos y flechas. Para ordenar. Pero no quiero ordenar, quiero simplificar. Pero, ¿cómo hacerlo?
A veces me siento como un elefante encerrado en una jaula, ¿y si tengo, como en el cuento, la puerta abierta pero no me doy cuenta?
Atenta, atenta, dice Krishnamurti.
Y mientras, sigo encontrando señales por todos los caminos.
¿Casualidades?
1 comentario:
TU MEJOR SEÑAL ES LA QUE TE DICTA EL CORAZON
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