sábado, 27 de noviembre de 2010

Ese pequeño punto azul



Lo vi y me emocioné. Lo volví a ver con mis hijas y me volví a emocionar.
Lo dejo aquí. Para que esté cerca. Como un punto. De referencia. Como aquel punto que también quedó aquí. Como una cuenta de un collar. Como un zoom con el que juego, con el que me acerco y me alejo.
¿Y si nos alejamos demasiado? ¿seremos capaces de recordar donde estaba el punto?
¿seremos capaces de encontrar nuestro hogar?

miércoles, 24 de noviembre de 2010

h

Con h de hoy. Con h de hueco. Hoy me tumbo en el suelo. No me quiero mover.
Silence. I need silence.
Y el asfalto retumba. Y susurra: busca tierra mojada, rompe las guías y tírate al mar.
Silence. Look for silence.

jueves, 18 de noviembre de 2010

martes, 16 de noviembre de 2010

Choose

I wonder how much life I can take
Lou Reed


Noviembre. Me gusta este mes. Mes de sol y frío. De caminos llenos de hojas. Un noviembre empezó. Este sentimiento. Ahora me iría de nuevo. Dejaría todo. Y me iría a caminar. A seguir flechas amarillas, o azules, da igual el color. A sentir el frío en la piel de la cara y el cansancio en las piernas. Y caminar y seguir caminando. En silencio. Con la naturaleza.


Ahora siento demasiados cables dentro de mi cabeza. Esta mañana he hecho el mandala que me enseñó Esen, como un árbol, desde el centro hacia afuera. Y el árbol tenía demasiadas ramas. ¿Dónde está el demasiado? ¿Cómo medirlo? Hay que salir de las ciudades. Dicen. En Asia es diferente. Digo. Pero, ¿qué hacer? ¿salir?¿entrar?¿buscar?... Acaso descansar. Pero sin morir. Sólo para recuperar energía, curar alguna rama o romperla del todo, y ver los brotes nuevos. Y seguir. Diferente. Siempre es diferente.


En días como hoy simplemente desaparecería. Caminando. Descalza.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Á noite


Otra vez. Otra noche mágica. La segunda. La primera fue en India. Otra vez tan cerca. Lejos, pero tan cerca. Sobre sábanas blancas. Palabras que avisan y , después, entran y acarician. Como capas de terciopelo que arropan en una noche de otoño.

Te adoro es todo.

Lugares


-He soñado contigo. Un sueño rarísimo. Estábamos llorando. Nos despedíamos. Te ibas a vivir fuera. Con las niñas. A Cantabria... Qué locura, ¿verdad? Los sueños... -dice.
Las niñas siguen jugando a basket y, en el suelo, las hojas siguen formando remolinos.
-No, no es ninguna locura. Hace tres años me iba a ir a vivir fuera. A algún lugar en Asia. Y tengo una casa, bueno, un prao con una casa que se cae, de piedra, en Cantabria. En La Vega de Pas.

Ella se queda muda.

Me sigue doliendo la mano derecha. Y ahora la cintura. Sale líquido marrón, no rojo. Algo está cambiando y mi cuerpo lo está intentando domar.

martes, 9 de noviembre de 2010

Hilos y burbujas


Diwali. El festival de las luces. Nos vestimos. Limpiamos. Abrimos. Yo te bendigo. Dice la luz. Y sonreímos. Y las luces nos acarician. Y las burbujas juguetean.
Compro verduras de plástico. La última vez. Digo. Y me prometo empezar a comprar a cooperativas ecológicas locales. No compres, planta. No compres, recicla.
El algodón sigue subiendo. Cada día. En China se ha duplicado. El tejido es como un diamante ahora. Dice Connie. Ninguna fábrica lo quiere soltar, porque cada día vale más. En India se habla de cerrar la exportación. En Paskistán las catástrofes de este año arrasaron las cosechas. Algodón. Orgánico. Biológico. Blanco. Marrón. Negro. Se está tiñendo de negro. Y, mientras, los precios de la ropa en la calle siguen bajando. Y, mientras, una amiga me comenta sorprendida que para hacer unos vaqueros se necesitan 80 litros de agua.
¿Para qué necesitamos tanta ropa?
Voy a poner un huerto en mi jardín.

sábado, 6 de noviembre de 2010

Struggle. For integrity.


Tu vida cambiará después de escuchar esta canción.

Y cambió.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Distancias

A veces un pequeño paso es suficiente para salir de la sombra.

martes, 2 de noviembre de 2010